El Padre de las Luces: No cambia – Josué 15:63
El hecho de que Dios no cambia asegura dos cosas importantes: La vida eterna a todos los que creen en Jesús y la condenación eterna a todos los que rehúsan creer en Jesús.
El hecho de que Dios no cambia asegura dos cosas importantes: La vida eterna a todos los que creen en Jesús y la condenación eterna a todos los que rehúsan creer en Jesús.
El Padre atesoró y preparó todo para que a su debido tiempo naciera el redentor. ¿Puedes ver el tesoro que Dios te dejó en Jesús? Ven a Él para la salvación eterna de tu alma.
Los hombres piensan que por su esfuerzo pueden conseguir todo lo que les parece bueno para la vida, pero por mucho que se esfuerzan, siempre les falta más y las cosas se pierden con el tiempo
Dios ha dado a los hombres vida y todas las cosas para que le busquen, para que lleguen a Él, pero una y otra vez han errado el camino.
Jesús es la manifestación plena de las riquezas de la gracia de Dios para salvación a todos los hombres, por eso, en su nombre, se anuncia perdón de pecados y herencia entre los santificados
Todo don verdadero, perfecto y eterno, solo desciende de la morada de Dios. Él es el dueño y creador de todas las cosas y lo da a quien Él quiere, cuando Él quiere y por medio de quien quiere.
Al finalizar la carrera recibirán el galardón y entrarán en el gozo de su Señor. ¿Tienes esta esperanza de ver la gloria de Dios y descansar eternamente a su lado?
La vida cristiana parece difícil, llena de restricciones y oposición, angustias y dolor y que no se puede hacer lo que uno quiere. Pero no es así para los que aman a Dios.
Desde la eternidad, Dios ha prometido vida eterna a todos los que creen en Jesús, aquellos que le siguen guardando su palabra, haciendo Su voluntad, aquellos que esperan en Su misericordia el tiempo determinado por Él para recibir su herencia.
El único que siempre amó a Dios con una obediencia perfecta, fue Jesús, quien siguiendo el mandato del Padre fue a la cruz a morir por la desobediencia y rebeldía de su pueblo