En la adoracion – Josué 8:30-35
Dios le dio la victoria a su pueblo, y sin tiempo que perder, Él debía ser adorado y exaltado con gratitud por la victoria…
Dios le dio la victoria a su pueblo, y sin tiempo que perder, Él debía ser adorado y exaltado con gratitud por la victoria…
El pueblo ya estaba listo para la batalla. Desde muy temprano, su general estaba preparado para mirar de que todas las cosas fueran hechas…
Cuando el pueblo estuvo limpio de su pecado y reconciliado con Dios, Él les mostró el camino a seguir. Les dio instrucciones…
El pecado había sido quitado y ahora Dios estaba con ellos, no había nada que temer, por Su poder todos sus enemigos serían entregados en sus manos y juzgados…
El pueblo había sido derrotado porque Dios no estaba con ellos a causa de su pecado. Cuando el pecado fue reconocido…