Día: Miércoles
Tema: “Es la herencia de los suyos”
Lectura: Josué 13:14; Josué 13:33
Versículo clave: 14 y 33
Lectura de apoyo: Lamentaciones 3:24; Salmos 16:5, 73:25-28; Mateo 13:44-46
Las instrucciones del Conquistador eran claras, la heredad de los sacerdotes era únicamente Dios. Ninguna posesión pasajera de este mundo les sería dada para que disfruten de Dios cómo su tesoro. Servirle con la esperanza de estar siempre a su lado sería su herencia. El Conquistador es la herencia de los suyos.
Cuando nada existía, estaba Dios. Él creo todas las cosas con el poder de su palabra y un día cuando todo lo que vemos ya no esté, Dios seguirá estando allí. Jesús es el único y verdadero tesoro de incalculable valor que nunca se puede perder. Aunque todo el mundo desaparezca Él permanecerá firme y con Él todos los suyos. Por eso no sirve de nada ganar todo el dinero de este mundo o toda la fama de este mundo o todo lo que este mundo ofrezca, si el alma no está guardada en Cristo, todo se perderá. El valor infinito de Jesús cubrió todas nuestras deudas ante Dios y nos compró la vida eterna. ¿Es Jesús tu tesoro? ¿Es Jesús tu porción en esta vida? Marcos 8:34-37