Día: Lunes
Tema: “Un propósito restaurado”
Lectura: Génesis 5:1-2
Versículos clave: 2
Lectura de apoyo: Romanos 5:12 y 19; 1ª Corintios 15:22 y 45; Col 1:15-20
Dios creó todas las cosas (aun al hombre) para la gloria de su nombre, para que todos vean y comprendan su poder y majestad. Cuando el hombre pecó (unido a su esposa como uno, bajo un mismo nombre), este propósito se corrompió y Dios prometió un salvador para terminar con las obras del diablo y restaurar el propósito original. La esperanza siempre está en Dios y no en lo que pueda hacer el hombre.
Fue claro que por causa de un hombre (Adán) el pecado y la muerte entraron al mundo, pero Dios estableció que también por otro hombre (El postrer Adán: Jesús) entrara la justicia para todo aquel que cree. El propósito original de la creación es la gloria de Dios y en este hombre justo, Jesús, unido en un solo cuerpo con su esposa (la iglesia) el propósito es restaurado. Jesús terminó con el dominio del pecado muriendo en la cruz y al resucitar declara justos a todos los que creen en Él dándoles el poder para qué unidos a Él como iglesia (su cuerpo, su esposa) den por siempre la gloria a Dios. Sin Jesús vivimos para pecar y en el pecado encontramos toda nuestra esperanza en esta vida pasajera. Con Jesús, vivimos libres del poder del pecado y su Espíritu nos guía para cumplir el propósito para el cuál fuimos creados: la gloria de Dios gozando de ella por toda la eternidad. ¿Eres uno con Jesús? ¿Has sido unido por la fe al cuerpo de Jesús? Efesios 3:21