Día: Jueves
Tema: “Espera en su Señor”
Lectura: Génesis 13:14-17
Versículo clave: 14
Lectura de apoyo: Salmos 2:7 y 119:49-50; Isaías 49:4-6; Juan 8:57-58
Abram recuperó la comunión con Dios y al volver a escucharle le reiteró y amplió su promesa. Los ojos de la fe de Abram debían recorrer la tierra en todas las direcciones con la certeza de que en el tiempo determinado por su Señor toda esa tierra sería suya.
Jesús ha estado desde la eternidad junto al Padre y el Espíritu Santo en íntima y perfecta comunión. Los tres hicieron un pacto eterno donde acordaron que haría cada uno para la manifestación eterna de su gloria. El Hijo se dispuso a vestirse de barro con forma de siervo dejando temporalmente su estado glorioso junto al Padre para sujetarse a aflicción, dolor y obediencia. No estuvo buscando tesoro para sí, sino que descansó en la palabra eterna que permanece en los cielos. Él sabía que en el tiempo determinado todas las naciones serían suyas pero su tiempo en la tierra era para padecer y que su alma sea afligida y por medio de ese sacrificio llevar millones de hijos a la gloria para morar eternamente en la tierra prometida por el Padre. Su porción siempre estuvo en Dios, así esperó en Él y vino a ser autor de eterna salvación para todos los que creen en Él. Dios hecho siervo espera en su Señor.
Lamentaciones 3:24-25